Mientras los medios locales registraban la tragedia, un equipo con uniformes diferentes al de los bomberos de la zona aparecieron a trabajar junto a ellos: era la Brigada de ALMA.


Solo tres horas antes de la tragedia, la brigada de turno había simulado un accidente vehicular cerca del Observatorio Simons, obteniendo muy buenos tiempos de respuesta. “Nosotros siempre tenemos que estar en preparación, con capacitaciones y entrenamientos lo más reales posibles, porque, ni Dios quiera, se acciona o se activa el llamado de emergencia y tenemos que estar al 100%. Y eso resultó”, agrega.



Desde febrero han mantenido reuniones con los cuerpos de Ambulancia, Bomberos y Carabineros de San Pedro y Toconao, quienes reconocen una gran preparación e infraestructura por parte de la brigada. Aún más si se socorre a gran altitud, como ocurrió con el bus de pasajeros accidentado en Paso Jama.
Los entrenamientos constantes que reciben por parte del Departamento de Safety y del Policlínico, se suman a dos capacitaciones al año: una para repasar conocimientos con la Dirección General de Aeronáutica Civil, y otro con la Academia Nacional de Bomberos.




“No hay nada más lindo que uno pueda aportar de alguna forma a la sociedad, a tu grupo de trabajo, a tu gente, que no es solamente en el ámbito laboral. Y es bueno también tener la perspectiva femenina”, agrega.


“Todo lo que se hace acá es muy importante. Lo bueno es que la institución así lo toma, y es un alineamiento que tenemos todos: las personas primero y después el resto”, concluye Sebastián.
0 comentarios